martes, 18 de agosto de 2009

Cogidas... de toros, o la marca de la estupidez

Un buen día, Marta (25 años) sale de su casa una noche para divertirse con sus amigas. Entran en la discoteca de polígono industrial de su barrio y conocen a un grupo de tíos muy simpáticos. La noche pasa, y Marta se siente más que atraída por Alex, un joven delgado y moreno, con la cabeza rapada.
Pasan los días y la relación entre Marta y Alex va viento en popa. Una noche en casa de los padres de Marta, deciden dar un paso más en su relación y acostarse juntos. Pero entonces, cuando se están desnudando, Marta descubre uno de los varios secretos de Alex: una enorme cicatriz en su muslo derecho.
Ante la sorpresa de Marta, Alex le explica por encima una borrosa historia sobre unas fiestas del pueblo de sus primos y un toro que le embiste. Lo que Marta no sabe, es que a Alex le pilló un toro por hacer el subnormal.

Esa marca, es la marca de la estupidez.

A puntito de saltar al ruedo...

Mientras que los cuerpos marcados, o hasta mutilados, de los toreros suelen resultar atractivos para muchas mujeres, que los consideran poco menos que heridas de guerra, símbolos de masculinidad, las heridas de las cogidas en las fiestas populares suelen ser, en un gran número de casos, resultado de la imbecilidad.

Este año ha sido funesto en cuanto a cifras de cogidas en las fiestas del verano. Las astas del toro han dejado a su paso numerosos heridos e incluso muertos. Uno menor de edad incluso.

Vamos a ser un poco sinceros y hablar a las claras. ¿Qué coño hace la gente poniéndose delante de un toro en según qué momentos? ¿No va siendo hora de salir de las cavernas? Entiendo que un torero profesional se ponga delante de un morlaco porque para eso le pagan pero ¿los demás?. ¿A quién en su sano juicio se le ocurre correr delante de una manada de toros de 500 kilos con una resaca del quince, o saltar a las plazas en plan espontáneo? Es que hay que ser memo. A ver si no porque cuando les preguntan a esa gente como se hicieron esas heridas MIENTEN COMO CABRONES. Muchos huevos quisieron demostrar al saltar a la plaza, pero cuando les toca decir la verdad, son incapaces de admitir que el toro le corneó por estar haciendo el gamusino cuando no debían.

Unos vaqueros ceñiditos. Perfectos para correr rápido.

Lo habéis visto por televisión. Los pokis del pueblo llamando al toro, pillándolo del rabo, gritándole a la cara... y tropezando en el último momento para ser arrollados como si fueran peleles. Eso sí, cuando muestran sus heridas, o bien se hacen los héroes o bien intentan dar pena al personal. Lo que realmente merecen es la mayor de nuestras indiferencias.

Lo hay que le echan cara al asunto... y la pierden.

Marta creyó a Alex en un primer momento. Pero tras ver el vídeo de la cogida de su novio en "Impacto TV", decidió que estaría mejor saliendo con alguien menos subnormal que un tío capaz de saltar al ruedo ataviado con unas chancletas, una gorra y una camiseta "No Fear".

Manolete: si no sabes torear, pa qué te metes....

¡Buenri! ¡Sube que todavía entra uno más! ¡Vámonos de fies!

8 comentarios:

Crowley dijo...

Aún les pasa poco por capullos. Si no sabes pa que te metes, hombre!. Yo, de todas maneras, estoy en contra de las corridas de toros, pero claro, es una opinión personal.
Saludos

Mauro Picotto dijo...

sinceramente, prefiero que se metan a correr delante del toro absolutamente todos los canis y pokis del pais con tal de no encontrarlos ebrios en la carretera.

Tropezón dijo...

Hay que ser gilipollicas para hacer eso. En las fiestas de mi ciudad,como en todas partes supongo, después del concurso de recortes raro es ver a cientos de subnormales con chanclas, gorrilla-peineta y rosario al cuello llamando la atención de una vaquilla.

Lo que me jode es que no los destripe a todos, el pobre animal.

Deprisa dijo...

La verdad que muchos se lo buscan porque hay que ser estúpido para pensar que un toro de 500 kg al que estás agarrando del rabo y escupiendo no se va a dar la vuelta para cornearte a la primera de cambio.

Y suerte si sólo le cornea...

Imbéciles hay en todos lados.

Dr. Quatermass dijo...

Esto me recuerda a un caso que ha habido este verano en el pirineo en el que ha fallecido una chica en un descenso de rafting al golpearse con una roca. Los de la empresa de deportes de aventura dijeron : "si es que ya hace tiempo de que avisamos al ayuntamiendo de que quitaran esa roca que iba a haber una desgracia". Pero imbéciles, ¿quien estaba primero la roca o vosotros haciendo el gilipollas por las piedras?.

Valga el símil para los que piensan que es "normal" ponerse delante de un toro para hacer el gilipollas.

Saludos y gran post.

Anónimo dijo...

Dejad a los animales de una vez, necios taraos.

Anónimo dijo...

Quien siembra,recoje.
Ajo y agua.

pascual dijo...

Lo que sobra es gente corrupta, sadica, codiciosa y glotona en este pais.
Por suerte la gente buena, con sensibilidad y compasion hacia los animales va ganando terreno.
ABAJO LA TAUROMAFIA.